viernes, 21 de noviembre de 2014

Girar la mirada hacia el interior.

Y qué entiendo por girar la mirada hacia el interior?.  Para empezar hacerse responsable de lo que digo y hago. Verme, o morir en el intento de verme ;-). Para mi es tomar consciencia de mis actos y mi comunicación, con lo de fuera, y sobre todo, hacia adentro.  Y tiene mucho que ver con la práctica de la atención. Con estar presente, con observar con otros ojos.

Para llevar la mirada hacia adentro preciso estar atenta. Poner atención. La elección en lo que pongo la atención me define. Me condiciona completamente. Es decir, una misma escena la puedo vivir de forma totalmente diferente según ponga mi foco de atención, mi foco de luz, en un lado o en el opuesto, o bien no lo ponga y lo deje pasar.

.-Qué luz? Y ahora hablamos de la luz?
.- Sí. La luz con la que enfocamos es todo. Y es la cantidad de luz que dejemos pasar, porque eso depende de cada uno de nosotros. La luz aparece cuando me aparto, si no pongo obstáculos –y estoy hablando del ego- dejaré pasar la luz, y eso determinará como veo las cosas o como no las veo…
Pero volvamos al ejemplo de antes… Una misma situación puede ser vivida como un problema o como un reto. Y aplicándolo a la mirada interior, a cómo nos vemos a nosotros mismos, resulta evidente que, por ejemplo, nuestra propia valoración y autoestima puede variar ampliamente según pongamos el foco de atención en nuestras limitaciones y errores o en nuestras capacidades y aciertos.

…Y uno de los grandes retos de nuestra vida es saber a qué dedicarle la atención. Giro la mirada hacia el interior, miro y observo.
No hay vuelta atrás. Meditando, vuelvo a casa.  
Para volver a casa clika el siguiente link: https://www.youtube.com/watch?v=dzn0SXFc_u0










No hay comentarios:

Publicar un comentario